Hace poco nos enteramos que Amazon había adquirido Body Labs, una compañía cuyo objetivo era crear un software que generase modelos corporales tridimensionales. Es decir, un programa que se pudiese usar para poder probarnos prendas en “tiendas de ropa virtuales” o para crear avatares fotorrealistas para videojuegos.
Las demostraciones que tenían en el sitio web mostraban un vídeo en el que aparecía un hombre bailando y al que se le podían ir colocando un traje, unos guantes de boxeo o unas zapatillas de conejito.
Esta tecnología, basada en realidad aumentada, pretende poder escanear nuestro cuerpo en 3D y que “el mismo cuerpo sea ofrecido como una plataforma y alrededor del cual se diseñan, fabrican, compran y venden productos y servicios recomendados”. Esto es, que las tiendas nos puedan ofrecer directamente nuestra talla o recomendaciones acerca de colores o complementos.
Todavía no está muy claro qué es lo que pretende hacer Amazon con este tipo de tecnología pero, visto que ya están trabajando en marcas de ropa propias, es posible que quieran introducir un servicio capaz de ofrecer un ajuste personalizado que les diera una ventaja sobre sus competidores.
Aunque las primeras filtraciones hablaban de que le adquisición rondaba sobre los 100 millones dólares, fuentes de más calidad sugerían un precio de entre 50 y 70 millones de dólares.
¿Mejorará la realidad aumentada nuestra experiencia con las compras de ropa online o por el contrario, nos hará desear más que nunca ir a tiendas físicas?
