Dos extremeños, un chino, móviles agotados, medios de comunicación, políticos, ForoCoches… Un escándalo dónde lo único genuínamente español son los tintes Berlanguianos.
Zetta Phone, el iPhone extremeño
Desde Zafra, un emprendedor, un técnico electrónico y un socio chino presentaron al mundo en 2014 el «iPhone Extremeño», su smartphone Multiverso 5.5. El logo de la marca, una bellota con un mordisco a la derecha, ya era toda una declaración de intenciones: la bellota extremeña de Zetta en contraposición a la manzana californiana de Apple. Tres jóvenes que con esfuerzo y sin apenas infraestructura, lograron sacar al mercado un móvil diseñado y ensamblado en España, con piezas de fabricación china, de un precio asequible y unas prestaciones a la altura de competencia dentro de su franja. Una auténtica proeza.
El éxito en ventas y el reconocimiento a Zetta
Periódicos, internet, televisión, radio… Todos querían entrevistar a Unai, el emprendedor del equipo y portavoz a la sazón. Zetta y sus terminales eran noticia en los medios. La venta online se quedó corta y decidieron comenzar a abrir comercios propios en su comunidad autónoma (hasta 7 en la actualidad). El modelo Zetta Multiverso agota sus 1200 unidades en semanas y ordenan una segunda partida de 3000 unidades más. El éxito es fulminante, tanto que en Noviembre de 2015, un mes crucial por la cercanía con la campaña de Navidad, tienen una reunión con Guillermo Fernandez Vara, Presidente de la Junta de extremadura, ocasión que aprovechan para presentar el Conquistador Plus, su nuevo terminal. Contaban también con el reconocimiento de la Asociación de Empresarios de Zafra y la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Provincia de Badajoz. Apenas un año había bastado a Unai Nieto, Eric Bojún (de nombre real Cui) y Manuel Muñoz para convertirse en el referente de jóvenes empresarios de éxito en el sector tecnológico. habían nacido Los tres de Bellota Valley. 
De «Bellota Valley» a «Bellotagate».
Su propia fama les pone en el punto de mira. El diario digital «El Español», publica su artículo «El ‘iPhone Extremeño’ de la bellota sueña con comerse a la manzana de Apple» en su sección «Grandes Historias». En él, Unai Nieto no escatima en detalles épicos para emocionar con la mitología de la propia marca.
Recibimos apoyo desde el principio. Incluso la Junta de Extremadura, que funciona bastante bien en ese sentido, nos recibió desde un primer momento. Quisieron conocer el producto y estar con nosotros. Respaldarlo, interesarse por su desarrollo. Nos sorprendió mucho que la respuesta fuese tan multitudinaria.
Fuente: El Español
Desde los hilos de Forocoches surgieron hace meses las primeras dudas: ¿Era posible crear un terminal desde cero, fabricarlo y distribuirlo con éxito en un año sin apenas infraestructura?. Los mismos motivos que habían encumbrado a Zetta estaban levantando las primeras sospechas entre usuarios. Demasiado bueno, bonito y barato para ser real; los usuarios comenzaban a debatir árduamente sobre el tema, mostrando las similitudes de su gama Conquistador con modelos de la marca china Xiaomi.
El asunto escapa del universo ForoCochero a través del portal The Geek Hammer: «Teléfonos Zetta: cómo hacer dinero mintiéndo al cliente«, dónde exponen toda la presunta estafa: los móviles Zetta no son más que modelos de Xiaomi a los que se les ha añadido pegatinas de la marca por encima de las marcas del fabricante. No contentos con esto, recopilando la información de Forocoches, identifican los modelos exactos de Xiaomi que han sido remarcado. El precio sale a la luz, esos móviles podían adquirirse por una media de 60€ menos que los precios de Zetta, aunque en algunos casos, el precio se disparaba hasta duplicarlo. La prensa comienza a desvelar más detalles: los Zetta ni siquiera cambiaban la caja de fábrica de los Xiaomi, símplemente añadían una pegatina por encima, con la bandera de Extremadura, para tapar los logos del fabricante, el Sistema Operativo utilizado para «españolizar» el terminal era un CyanogenMod gratuíto, de uso libre pero restringido para uso comercial… Desde el canal de YouTube del programa de radio LaBerrea89, podemos ver un vídeo dónde se ponen en evidencia todas las mentiras de la marca de la bellota.
Misteriosamente, la página web de Zetta cae y su actividad en redes sociales cesa, hasta que indican que su web está siendo «atacada», pidiendo disculpas por las molestias ocasionadas. Necesitaban tiempo para elaborar una respuesta. La asociación de defensa de los Derechos de los consumidores, Facua, es contundente: 
El comunicado, Facua y la investigación de la Junta de Extremadura.
Días mas tarde, Zetta reaparece con un comunicado en el que se empantanan más profundamente. La marca se defiende asegurando que «comparte componentes electrónicos con empresas del sector asiático», por lo que Facua se pone en contacto con Xiaomi, que desmiente cualquier vínculo comercial con la marca extremeña, desconocían que éstos estaban remarcando sus productos. En nombre de los consumidores, la asociación reclama a las Autoridades de Consumo de Extremadura y Madrid una multa (ya que aunque presuman de ser una marca 100% extremeña, su domicilio fiscal consta en la capital) y que la Fiscalía investigue el caso. Ante el revuelo y las especulaciones que ya campan a sus anchas por Internet, con usuarios de la marca siendo entrevistados en la prensa mostrando su indignación, blogs mostrando comparativas en las que se demostraba que no había diferencias en el hardware de los modelos Zetta y sus homólogos chinos, fotos y videos diversos de las pegatinas sobrepuestas sobre las de Xiaomi, la Junta de Extremadura finalmente ha accedido a abrir una Investigación desde la Secretaría General de Políticas de Consumo para esclarecer los hechos y ha negado que Zetta haya recibido ningún tipo de ayuda o subvención pública, aunque, como se puede comprobar en este link, Unai Nieto, uno de los fundadores, recibió una ayuda de 2396,28€ procedentes del Programa de Recualificación Profesional del Ministerio de Empleo y Seguridad Social en el año 2013.
Una historia coral, con tanto descaro que sobrepasa el esperpento de las películas de Berlanga. ¿Otro golpe a la «Marca España» o «Marca España» en su máxima expresión?
