Es casi una extensión de nuestro brazo; el smartphone es un compañero inseparable y también centraliza a otros gadgets que solemos llevar encima, por eso te vamos a dar unos consejos acerca de cómo cuidar de tu móvil en verano.
Protege tu móvil del el agua y el polvo
Es importante proteger a tu teléfono del agua, pero también del polvo. que te seques las manos para usarlo entre baño y baño, no te garantiza que a través de los conectores esté acumulando polvo y partículas que son tan o más dañinas que el agua. Existen fundas universales de PVC que te permitirán usar tu móvil en la playa protegiéndolo de los elementos, como esta de Tewaterunik con la que podrás sacar fotos bajo el agua y practicar tus deportes acuáticos favoritos.
Los amigos de lo ajeno no se van de vacaciones.
Por lo menos en agosto, que también es temporada alta para ellos. No hay gadget que por el momento evite el robo, pero ser un poco cautos y revisar nuestros bolsos y bolsillos periódicamente para ver si está todo bien nos va a ahorrar sobresaltos. La clave de acceso o la activación mediante huella digital es disuasoria, pero tampoco lo suficiente. Instala o configura correctamente la aplicación de búsqueda de tu terminal para que puedas localizarlo en caso de extravío o que puedas borrar tu contenido personal de forma remota en caso de robo. También es interesante que guardes en un sitio aparte el código IMEI para que puedas bloquear completamente el terminal. Y una cuestión tonta, pero muy útil: anota el teléfono completo de tu operador. Normalmente desde nuestros móviles marcamos una numeración corta para solicitar atención al cliente, pero esas numeraciones no son válidas para llamar desde otras compañías o desde el extranjero. Asegúrate que puedes ponerte en contacto con tu compañía en caso de tener que bloquear tu SIM.
Cuidado con el sol y el calor
Los móviles actuales tienen sistemas de seguridad que se activan cuando la temperatura se eleva demasiado y los desconectan para evitar sufrir daños, pero no es muy aconsejable dejar el móvil, por ejemplo, a pleno sol encima de la guantera del coche. Aunque estés en una zona que no te haga preocuparte por un robo, ten cuidado siempre de que el móvil no reciba luz solar directa para evitar que el calor provoque daños en la batería y la luz no dañe la pantalla. Tampoco es buena idea dejarlo en un bolsillo exterior en la bolsa de playa. Intenta que quede bien protegido del sol en el interior, por ejemplo, envolviéndolo en tu camiseta mientras no la estás usando.
Y el más importante… ¡No te quedes sin batería!
Aunque escapemos a desconectar, nuestro móvil también resulta imprescindible en la montaña. Para orientarnos, para hacer fotografías, incluso para solicitar ayuda en un apuro, por lo menos una persona del grupo, debería llevar un smartphone encima. Pero una vez acampados o disfrutando de una caminata, se complica la tarea de encontrar un sitio dónde poder cargar la batería. Cargadores solares como éste de Yokkao se enganchan a nuestra mochila o se pueden colgar en la parte exterior de nuestra tienda de campaña con sus paneles fotovoltáicos orientados al sol y su batería de 5000 mAh permite almacenar energía suficiente como para tener más de una carga completa en nuestros móviles. Además, está construído de manera robusta para aguantar todos los trotes, dispone de una útil luz LED y tiene un sistema de desconexión de seguridad automático para evitar sobrecargas.
